jueves, 28 de noviembre de 2013

Crítica de la “crítica”

-El fotógrafo del absurdo en la moda

Las fotos de Charlie Engman destilan una visión alejada de estereotipos, llena de naturalidad e improvisación. Hedonismo juvenil y extrañas composiciones para sacar a la moda de contexto.


Partiendo de que Engman es un chico que no llega a los 25 años, las acepciones que se le otorgan en el reportaje de SModa de “hedonismo juvenil”, “fotógrafo de lo absurdo” y “composiciones extrañas”, no terminan de convencerme como tarjeta de presentación del fotógrafo.
 Puede que esas acepciones no sean las que más se ajusten a la personalidad de Engman, que se ha hecho un hueco en el mundo profesional de la fotografía con un estilo característico que poco tiene que ver, al menos a simple vista, con los cánones que se imponen en la fotografía publicitaria y de moda.

Sus fotografías en rasgos generales se pueden resumir en una visión fresca y alternativa de su objetivo, donde los personajes retratados poco se asemejan a los que predominan en el mundo de la moda, con tan alto grado de composición, que poco o nada queda a la improvisación.
-Puede que- detrás de sus instantáneas Engman elabore una serie de preparativos, ya sea por el mero hecho de que algunas fotografías tienen fines publicitarios y nos muestran un producto; pero el aura juvenil y despreocupada que envuelve su trabajo difiere totalmente de la mayoría de los otros reportajes fotográficos realizados con el mismo fin.



Engman oferta un tipo de fotografía que resulta innovador, o fuera de lo establecido, que al caso, resulta interesante para las marcas que lo contratan, y que al ojo del simple espectador que ojea las páginas en una revista de moda, llame la atención por el hecho de que las modelos no parecen simples maniquíes.

Las influencias de Engman abarcan desde la danza y performance a el gusto por la cultura asiática, -estudió japonés y coreano en la universidad- se aprecian en la utilización de colores saturados y encuadres activos que otorgan a sus fotografías jovialidad y dinamismo.


Se trata de un artista que despunta maneras y que resulta al menos interesante desde su carácter “rompedor” Es joven y con mucha trayectoria por delante que será influenciada por su madurez y experiencia que irán marcando las distintas etapas en las que evolucione el fotógrafo.


Por Silvia Ampuero.

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